Grand Jubilé

des 350 ans des apparitions

de Jésus à sainte Marguerite-Marie

"Rendre amour pour amour"

Itinerario jubilar

Querido peregrino, ¡bienvenido a Paray-le-Monial, la ciudad del Corazón de Jesús !
Con ocasión del jubileo del 350 aniversario de las apariciones de Jesús a Santa Margarita María, durante las cuales le reveló los secretos de su Sagrado Corazón, os proponemos un itinerario especial. En 4 etapas, este itinerario os llevará a hacer del Corazón de Jesús vuestra morada, para que día tras día podáis arder con su amor, ¡e irradiarlo a los que están cerca de vosotros !
Atravesar la Puerta del Jubileo es entrar en el Corazón de Jesús para renovaŕ en profundidad vuestra vida de bautizados y devolver amor por amor.

¡Feliz peregrinación !

1° ETAPA : LA BASÍLICA DEL SACRADO CORAZÓN

1° ETAPA : LA BASÍLICA DEL SACRADO CORAZÓN

Paso

Entro en la basílica. Me sobrecoge la belleza y la armonía de este majestuoso edificio. ¡Qué hermoso es cuando la gracia de lo sagrado se combina con el talento y el trabajo del hombre ! Tomo tiempo de sentarme y contemplar. Saboreo el silencio y la paz de este espacio. He llegado a Paray-le-Monial. Al final de mi viaje, Jesús me ofrece un tiempo de descanso en su iglesia. Me dejo acoger por él. Me mira y me ama. Conoce mi vida, todo el camino recorrido desde mi bautizo. Con él, a la luz de su indulgente mirada, puedo recorrer las grandes etapas de mi vida hasta el día de hoy.

 

PALABRA DE DIOS

Venid a mi todos los que estáis fatigados y sobrecargados, y yo os daré descanso. Tomad sobre vosotros mi yugo, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y hallareis descanso para vuestras almas. Mt 11, 28-29

Texto de santa Margarita-Maria

Estando yo delante del Santísimo Sacramento me encontré toda penetrada por Su divina presencia. El Señor me hizo reposar por muy largo tiempo sobre su pecho divino, en el cual me descubrió todas las maravillas de su amor y los secretos inexplicables de su Corazón Sagrado.

ORACIÓN

Después de haber tomado tiempo suficiente para disfrutar del silencio, la paz, la acogida de Jesús y el descanso que me ofrece, puedo situarme al pie de la escalinata del altar, sobre la placa que conmemora la visita de Juan-Pablo II en esta basílica. Como hijo o hija de la Iglesia, miembro del Cuerpo de Cristo por mi bautismo, Templo del Espíritu de Dios, profeso mi fe rezando el Credo.

Creo en Dios Padre, todopoderoso, creador del cielo y de la tierra. Y en Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios Padre, todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y a muertos.
Creo en el Espíritu Santo, la Santa Iglesia Católica, la comunión de los santos, el perdón de los pe-cados, la resurrección de la carne y la vida eterna.
Amen.

Hacia la siguente etapa

Mientras camino hacia la capilla de San Juan, puedo rezar el rosario.

  1. En la cuenta grande, decir :
    Jesús, manso y humilde de corazón
    haz mi corazón semejante al tuyo.
  2. En las cuentas pequeñas :
    Corazón de Jesús,
    confío en ti y te amo.